Perdónate-perdóname-perdónale, te pase lo que te pase

Perdónate-perdóname-perdónale, te pase lo que te pase.

Perdónate-perdóname-perdónale, te pase lo que te pase

Perdónate-perdóname-perdónale¿Os acordáis cuando os conté que había estado en un pase privado con el  productor de la película «Encontrarás Dragones», Ignacio García Sancha y que con ese motivo estuvimos reflexionando sobre la felicidad?.

La realidad mundial que se palpa no solo en las cárceles sino en todos los actuales enfrentamientos bélicos mundiales, nos debe invitar a pensar sobre la realidad humana de «Perdónate-perdóname-perdónale».

Entender el perdón sin tener libertad es algo grande.

Todas las condenas y las guerras civiles han tenido, tienen y tendrán un alto contenido de culpabilidad y sobre todo de falta de perdón. Es precisamente  la actitud de perdón de los hombres, la que puede reconvertir los dramas humanos en historias de grandes personas que son capaces de soñar con un mundo mejor, gracias al «perdón».

Para los que vivimos en un país en paz y en libertad y  no la  hayáis visto todavía, ir a ver  «Encontrará Dragones». Es un buen plan familiar y/o social que os puede dar lugar después de verla, a una muy buena conversación sobre «la realidad de la amistad y el perdón». Perdónate-perdóname-perdónale

Pero también os digo no es película para ir a verla con niños entre los 12 ó 14 años. Ni la temática, ni el contenido de algunas escenas es recomendable para menores.

No es una película ni mística ni dulce, es una gran película con un alto contenido emocional.

 

 

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Comments ( 3 )

  • Maria

    Es tan facil hechar culpas a los demas que no nos paramos a pensar el por qué de mi rabia de mi malestar y hasta que no perdonamos y olvidamos no llegamos a esa serenidad que nos hace tener un semblante que transmite paz. Es mas dificil llegar al interior del alma que ignorar, por eso escuchamos frases como «no me hables de este tema», «no quiero oir hablar de esa persona»…, porque nos recuerda que tenemos algo pendiente, perdonar y perdonarnos.

  • Peter

    Enseñar, hoy, mañana, todos los días, setenta veces siete, ó sea siempre a perdonar. A quién sea, por lo que sea, en todo momento, pedir ayuda para hacerlo, acortar distancias pequeñas ó insufribles, no esperar, adelantarse… Este es el surco y el camino para forjar la felicidad que todos buscamos. Las herramientas para conseguirlo es tener voluntad de comprender, perdonar y olvidar, que es un gran ejercicio de relajación de donde sale como consecuencia el amar. Cuando te han enseñado a amar no sientes la necesidad de perdonar.
    Ver esta película una ó quizá dos veces, enseña los horrores consecuentes de una guerra, no precisamente por lo que pasa en el campo de batalla, sino por el deseo de venganza, de no renunciar al olvido, y vivir del odio como un estilo de vida. permanente Los individuos quedan marcados para siempre, sean los perdedores ó los ganadores. Héroes, pocos, quizás los únicos que mueren violentamente, antes y despues de la contienda.

  • M José Calvo

    Esta película, nos anseña lo importante que es perdonar, y pedir perdón. Ambas son manifestaciones del poder de nuestra libertad. Pero perdonar no es fácil. Hay que entrenarse en los detalles pequeños de la vida, para poder lograrlo si la ofensa es grande. Y se requiere, no solo comprensión, sino confiar en el otro; y poseer un corazón generoso: ir más alla de la justicia. Todos necesitamos el perdón, porque todos hacemos daño a los demás, auque no nos demos cuenta.
    Y después de perdonar, hay que olvidar; lo contrario denota que no hemos perdonado del todo.
    Como dicen unas sabias palabras:»¿Quieres ser feliz un momento? Véngate. ¿quieres ser feliz siempre? Perdona.»

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